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Para leer en la silla elèctrica

Poema de Al Berto

Poema de Al Berto

Sin título y bastante breve
 
tengo la mirada fija en los ángulos oscuros de la casa
intento descubrir un cruce de líneas misteriosas, y con ellas quiero
construir un templo en forma de isla
y de manos disponibles para el amor.
en realidad, estoy derrumbado
sobre la mesa de sucia formica de una taberna verde, no sé donde
busco las aves recogidas en el vértigo de la noche
borracho entrelazo los dedos
poseo los insectos duros como uñas desgarrando
los rostros blancos de las casas abandonadas, a la orilla del mar
dicen que al poseer todo esto
podría haber sido un hombre feliz, que tiene por defecto
interrogarse sobre la melancolía de las manos
esta memoria lámina incansable
un cigarro
otro cigarro ciertamente me va a calmar
¿qué sé yo sobre las tempestades de la sangre?. ¿y del agua?
en el fondo sólo amo el lado escondido de las islas
amanezco dolorosamente, escribo lo que puedo
estoy inmóvil, la luz me atraviesa como un sismo
hoy, voy a correr a la velocidad de mi soledad


Al Berto (1948-1997)

 

 

Imagen: Emil Alzamora - Minotaure (2006)

JRR Tolkien

JRR Tolkien

Como buen fan de Tolkien, me intereso no sólo por su obra sino también por lo que otros tiene que decir sobre ella.

Comparto un pack que contiene:

La biografía de Tolkien escrita por Daniel Grotta.

 

Tres tomos de Legendarium Historia de la Tierra Media

 

Bestiario De Tolkien  y El Hobbit - Etimologia De Una Histori de David Day

 

Arbol Y Hoja Y El Poema Mitopoeia, un ensayo de JRR Tolkien sobre los cuentos de Hadas.

 

Varios La Tierra Media, ensayos y homenajes por parte de autores como GRR Martin, Ursula K LeGuin y Poul Andersony Tolkien

 

Atlas De La Tierra Media de Karen Wynn Fonstad 

 

Espero guste.

Isaac Asimov

Isaac Asimov

Un día como hoy, pero de 1992, murió el prolífico Isaac Asimov.

Aquí un pack con varios de sus libros.

Julio Verne

Un 24 de marzo, pero de 1905, falleció el gran Julio Verne.

 

 

Comparto un pack con varias de sus obras.

¿ARTE POÉTICA? Por Czeslaw Milosz

Siempre he añorado una forma de mayor capacidad

que no fuera demasiado poesía ni demasiado prosa

y permitiera entendernos sin exponer a nadie,

ni al autor ni al lector, a las penas de mayor grado.

 

En la esencia misma de la poesía hay algo indecente:

brota de nosotros la cosa que ni sabíamos que dentro de nosotros existiera,

luego parpadeamos como si de dentro de nosotros saltara un tigre

y estuviera de pie, en la luz, con la cola pegando en sus costados.

 

Por eso con razón se dice que es el daimonion quien dicta la poesía

aunque se exagera afirmando que sea por cierto un ángel.

Es difícil entender de dónde este orgullo de los poetas

si les da vergüenza a veces cuando se ve su debilidad.

 

¿Qué hombre razonable querrá ser un estado de los demonios

que gobiernan allí como en su casa, hablan multitud de lenguas,

 

y como si fuera poco robarle su boca y su mano,

intentan por su conveniencia robarle el destino?

 

Porque lo enfermizo está en precio hoy día,

alguien podría pensar que sólo estoy bromeando

 

o que inventé una forma más

para elogiar el Arte sirviéndome de la ironía.

 

Había tiempos cuando se leían sólo libros sabios

que ayudaban a soportar dolor y desgracia.

Pero no es lo mismo que hojear las miles

de obras que provienen directamente de la clínica de psiquiatría.

 

Y sin embargo el mundo es diferente de lo que nos parece

y nosotros somos diferentes que en nuestro devaneo.

La gente guarda pues una honradez callada,

ganando así el respeto de sus parientes y vecinos.

 

Éste es el provecho de la poesía que nos recuerda

lo difícil que es quedarse uno la misma persona

porque nuestra casa está abierta, en la puerta no hay llave

y los huéspedes invisibles entran y salen.

 

Lo que cuento aquí, de acuerdo, no es poesía.

Porque las poesías pueden escribirse rara vez y de mala gana,

a la fuerza insoportable y sólo con esperanza

de que buenos y no malos espíritus dentro de nosotros tienen instrumento.

 

Traducción de JAN ZYCH

http://blogenlinearecta.wordpress.com/2011/06/29/un-poema-de-czeslaw-milosz/

 

James G Ballard

James G Ballard

James Graham Ballard (18 de noviembre de 1930 - 19 de abril de 2009), es un escritor británico de ciencia ficción, conocido por sus distopías, en las cuales critica el mundo consumista y burocrático en el que vivimos. 


Entre sus distopías se encuentran El mundo sumergido, El viento de la nada, La sequía y El mundo de cristal. 


Pero quizás entre sus libros más conocidos se encuentre Crash, llevada al cine por David Cronemberg. 

Aunque enmarcado en la llamada Nueva Ola de la ciencia ficción británica, la obra de Ballard se nutre de las vanguardias artísticas del siglo veinte, lo que conlleva a que sus libros sean de una lectura densa, dados los temas y en ocasiones las estructuras narativas empleadas, como en La exhibición de atrocidades, que a mí me recuerda El almuerzo desnudo de Burroughs. 






"Lo que convierte todas sus novelas en piezas fundamentales fuera y dentro del género es la pertinaz intención de Ballard de reemplazr el manido espacio exterior de los relatos clásicos de ciencia ficción por una indagación de lo que él mismo denomina espacio interior. (...) Así, el interés de las novelas citadas se desplaza hacia el choque p´sicológico entre personajes que pugnan por adaptarse a un mundo en descomposición -o, para ser más exactos, en recomposición- en detrimento de una colorista descripción de ese mismo mundo que se desintregra. Son metáforas extremas y persistentes, escritas con un estilo literario denso, y cuyo desarrollo es mera excusa para adentrar al lector, más y más, en un conjunto de mentalidades alteradas." Javier Fernández, ¿Por dónde se va a Ballard?, revista Quimera 282, Mayo del 2007, página 24. 



En este pack van a encontrar los siguiente libros: 

La exhibición de atrocidades. 

Cuentos. 

El imperio del sol. 

El mundo sumergido. 

El viento de la nada. 

Esperaré en Murak. 

Milenio negro. 

Mitos del futuro próximo. 

Vermillion Sands. 

Héctor Rojas Herazo: Límite y resplandor

Algo me fue negado desde mi comienzo,

desde mi profundo conocimiento.

Y he velado dulcemente

sobre las espadas que segaron mi luz.

Con nocturno rostro me he alzado

a batallar en el esplendor de mis dormidas normas,

con el pavor de mi júbilo primero

y en otra sombra abatida he pronunciado mi nombre,

mi tremendo, mi orgánico nombre,

mi nombre de filo y de simiente

bajo el sueño de un ángel.

Mis apetitos totales he derramado

como un tributo de reconocimiento,

mi olfato y mi tacto como duros presentes.

Mis olvidados sacrificios he reunido,

mis anteriores fuerzas,

mi casto furor,

mi más antiguo y añorado fuego.

Y he aquí que todas mis potencias

no logran arribar al límite de lo perdido.

En otra edad dichosa

mi palabra fue herida de terrestre amargura.

 

Tomado de aquí.

Tu bagre amigo

Tu bagre amigo

Si viviera mi vida

en forma de bagre

con andamios de piel y bigotes

al fondo de un estanque

y pasaras tú por ahí una noche

cuando la luna iluminara

mi oscuro hogar

y te pararas ahí, al borde de mi afecto

y pensaras “es hermoso,

acá, al lado del estanque, ojalá alguien me quisiera”,

Yo te querría y sería tu bagre

amigo y espantaría tan solitarios

pensamientos de tu mente

y de repente te sentirías en paz,

y te dirías, “¿me pregunto

si habrá bagres

en este estanque? Parece

un sitio perfecto para ellos”.

 

Richard Brautigan

Tomado de una matera.

Un día perfecto para el pez plátano-Salinger

No sé por qué, siempre me causan gracia las cosas que Seymour dice acerca de los peces platáno.

El problema con estos peces es que son unos peces tristes que terminan muriendo de varios disparos a la entrada del edificio Dakota...

Un día perfecto para el pez plátano


Avanzaron hasta que el agua llegó a la cintura de Sybil. Entonces el joven la levantó y la puso boca abajo en el flotador.

—¿Nunca usas gorro de baño ni nada de eso? —preguntó.

—No me sueltes —dijo Sybil—. Sujétame, ¿quieres?

—Señorita Carpenter, por favor. Yo sé lo que estoy haciendo —dijo el joven—. Ocúpate sólo de ver si aparece un pez plátano. Hoy es un día perfecto para los peces plátano.

—No veo ninguno —dijo Sybil.

—Es muy posible. Sus costumbres son muy curiosas. Muy curiosas. Siguió empujando el flotador. El agua le llegaba al pecho.

—Llevan una vida triste —dijo—. ¿Sabes lo que hacen, Sybil?

Ella negó con la cabeza.—Bueno, te lo explicaré. Entran en un pozo que está lleno de plátanos. Cuando entran, parecen peces como todos los demás. Pero, una vezdentro, se portan como cerdos, ¿sabes? He oído hablar de peces plátano que han entrado nadando en pozos de plátanos y llegaron a comersetenta y ocho plátanos —empujó al flotador y a su pasajera treinta centímetros más hacia el horizonte—. Claro, después de eso engordan tanto que ya no pueden salir. No pasan por la puerta.

—No vayamos tan lejos —dijo Sybil—. ¿Y qué pasa después con ellos?

—¿Qué pasa con quiénes?

—Con los peces plátano.

—Bueno, ¿te refieres a después de comer tantos plátanos que no pueden salir del pozo?

—Sí —dijo Sybil.

—Mira, lamento decírtelo, Sybil. Se mueren.

—¿Por qué? —preguntó Sybil.

—Contraen fiebre platanífera. Una enfermedad terrible.

—Ahí viene una ola —dijo Sybil nerviosa.

—La ignoraremos. La mataremos con la indiferencia —dijo el joven—, como dos engreídos. —Tomó los tobillos de Sybil con ambas manos yempujó para adelante y para abajo. El flotador levantó la proa por encima de la ola. El agua empapó los cabellos rubios de Sybil, pero sus gritoseran de puro placer.Cuando el flotador estuvo nuevamente inmóvil, se apartó de los ojos un mechón de pelo pegado, húmedo, y comentó:

—Acabo de ver uno.

—¿Un qué, amor mío?

—Un pez plátano.

—¡No, por Dios! —dijo el joven—. ¿Tenía algún plátano en la boca?

—Sí —dijo Sybil—. Seis.

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Jorge Gaitán Durán Si mañana despierto

De súbito respira uno mejor y el aire de la primavera 

llega al fondo. Mas sólo ha sido un plazo 

que el sufrimiento concede para que digamos la palabra. 

He ganado un día, he tenido el tiempo 

en mi boca como un vino. 

 


Suelo buscarme 

en la ciudad que pasa como un barco de locos por la noche. 

Sólo encuentro un rostro: hombre viejo y sin dientes 

a quien la dinastía, el poder, la riqueza, el genio, 

todo le han dado al cabo, salvo la muerte. 

 


Es un enemigo más temible que Dios, 

el sueño que puedo ser si mañana despierto 

y sé que vivo. 

Mas de súbito el alba 

me cae entre las manos como una naranja roja.

Cuentos de René Rebetez

Cuentos de René Rebetez

También en Scribd dejé abandonados estos papeles viejos con textos de René Rebetez:

El Mito de la Ciencia Ficción:

"La ciencia ficción es biblíca, popolvuhista, leviatánica, gilgameshiana."

Mateo, dos, dos, guión, cuatro-Un cuento navideño.

El otoño de las brujas.

El coleccionista.

Memorias de un crononauta.

Hector Rojas Herazo-Carnet de un escritor.

Hector Rojas Herazo-Carnet de un escritor.

En Scribd dejé olvidado este recorte de prensa.

"Rojas Herazo nos presenta una radiografía de su ser, una radiografía para copiar y reproducir" Jorge García Usta.

El diablo que vos matáis.

"Un ensayo infernal lleno de diabluras e irreverencias"

Escaneando los múltiples papeles que conforman mis restos del naufragio encontré este ensayo pícaresco y medio infernal escrito por el periodista colombiano Reinaldo Spitaletta.

Como buen estudiante, no hice ficha bibliográfica, así que ahora no tengo ni idea del título del libro en el que se publicó, si algún día lo averiguo, lo pongo. ^^

Lo subí a Megaupload.

El Hombre

El Hombre

El Hombre es un cuento del maestro Germán Espinosa con temática vampírica, que encontré entre mis múltiples papeles.

El cuento fue publicado por el Magazín Dominical del periodico El Universal de Cartagena hace ya unos años (no guardé la fecha de publicación), y es la primera vez que escaneo un texto para compartirlo; creo que me equivoqué al escanear una de las páginas, pero bueno, así va.

Lo subí a Megaupload.

Poema de Jorge Gaitàn Duràn

Quiero

Quiero vivir los nombres
que el incendio del mundo ha dado
al cuerpo que los mortales se disputan:
roca, joya del ser, memoria, fasto.

Quiero tocar las palabras
con que en vano intenté hurtarte
al duelo de cada día,
estela donde habitaban los dioses,
hoy lisa, espacio para el gesto imposible
que en el mármol fije el alma que nos falta.

No quiero morir sin antes
haberte impuesto como una ciudad entre los hombres,
quiero que seas ante la muerte
el único poema que se escriba en la tierra.

Jorge Gaitán Durán

Un poema de Jorge Gaitàn Duràn que encontrè aquì.

Poema de Gonzalo Rojas

Me gusta mucho este poema de Gonzalo Rojas:

A unas muchachas que hacen eso en lo oscuro


Bésense en la boca, lésbicas
baudelerianas, árdanse, aliméntense
o no por el tacto rubio de los pelos, largo
a largo el hueso gozoso, vívanse
la una a la otra en la sábana
perversa,
                y
áureas y serpientes ríanse
del vicio en el
encantamiento flexible, total
está lloviendo peste por todas partes de una costa
a otra de la Especie, torrencial
el semen ciego en su granizo mortuorio
del Este lúgubre
al Oeste, a juzgar
por el sonido y la furia del
espectáculo.
                   Así,
equívocas doncellas, húndanse, acéitense
locas de alto a bajo, jueguen
a eso, ábranse al abismo, ciérrense
como dos grandes orquídeas, diástole y sístole
de un mismo espejo.
                                De ustedes
se dirá que amaron la trizadura.
Nadie va a hablar de belleza.

 

Leìdo en El Ojo del Sur Poesìa.

Invocación para desorejarse

Para que el sombrero pudiese penetrar en mi testa, decidieron cortarme las dos orejas. Admiré sus deseos de simetría exquisita, que hizo que desde el principio su decisión fue de cortarme las dos orejas. Me sorprendió que tan lejos como era posible de un hospital, me fueran arrancadas con un bisturí que convertía al rasgar la carne en seda. Una urgencia como si alguien estuviese esperando en compraventa mis dos orejas. No hubo ninguna deliberación, pero comprendí que habían decidido que no se las llevaran. En sentido inverso, teniendo una en cada mano, las frotaron una sola vez contra el mármol de la repisa. Entró la patrona cantando y oprimió un limón contra la mancha que había quedado en la repisa. Pensé que se desprendería un humo o que se avivaría la mancha. Pensé, pero, cuando me asomé cuidadosamente, todo estaba igual, salvo el gesto de la patrona de encajarse en aquella situación cantando. Días después ví que arrojaba las gotas de limón en la parte de la repisa que no estaba manchada. Luego, tendría que repetirse la ceremonia o mi sacrificio estaba fuera de lugar, y no era a mí a quien debería haber arrancado las dos orejas. Sentí que era llamado para la otra ceremonia: dejarse insertar unas borlas azafranadas en el hueco dejado por las orejas. Unos mozalbetes, tal vez soldados vestidos de paisano, colocaban las borlas en una grietas abiertas en las paredes. No sé si era un aprendizaje o un hecho que se aclararía después. Mientras yo esperaba la ceremonia y los soldados continuaban martilleando, la patrona volvió a penetrar, ahora no cantaba, sino recogió una gran cantidad de almejas ya vaciadas que estaban por el suelo. Las hacía caer en su falda como si fueran flores. Luego, la noche anterior haian estado comiendo allí, antes de yo llegar, cuando aún tenía mis dos orejas. Me van pasando las borlas azafranadas de una a otra oreja, y la patrona me mira despacio, me recorre, me humedece. "Mañana, dice, volveré a recoger más almejas, traeré la canasta." "Mire, me dijo, si puedo hacerlo, como está tendido mi delantal, tengo las uñas como comidas en una pesadilla, pero eso sí lo he dejado como la nieve." "Todo lo que sale de esta casa, me dice con malicia, sale bien hecho." Claro, mis dos orejas han sido cortadas, me cuelgan dos borlas azafranadas, y cuando me asomo veo un delantal inmensamente blanco, no se mueve, y por la tarxde guardo caparazones vacíos de almejas. Otro delantal, otro delantal, delantales, otro delantal, otro delantal.


José Lezama Lima.
Relatos.
Alianza Editorial Colombiana, Bogotá, 1988.

Un Coney Island de la mente

Un Coney Island de la mente

 

Lawrence Ferlinghetti.

Ediciones Hiperión S.L. ; Madrid, 1981.

 

1

En las mejores escenas de Goya parece que vemos a las gentes

  en el momento exacto en que

      consiguieron por primera vez el título de

                     "sufriente humanidad"

  Se retuercen en la página

          con un verdadero furor

               de adversidad

    Amontonados

        gimiendo con niños y bayonetas

        bajo cielos de cemento

  en un paisaje abstracto de árboles volados

   estatuas torcidas alas y picos de murciélagos

               horcas resbaladizas

                          cadáveres y carnívoras pollas

  y todos los vociferantes monstruos finales

    de la

               "imaginación del desastre"

 son tan malditamente reales

                  que es como si todavía existiesen de verdad

 

 Y existen

 

    Sólo el paisaje ha cambiado

 

Todavía están alineados por las carreteras

 atormentados por los legionarios

                   falsos molinos de viento y gallos dementes

 

es la misma gente

       sólo que más lejos de casa

     en autopistas de cincuenta carriles

            en un continente de hormigón

                con blandos y grandes anuncios espaciados

                       que ilustran imbéciles ilusiones de felicidad

 

La escena muestra menos carretas

               pero más ciudadanos mutilados

                      en coches pintados

      y tienen extrañas matrículas

   y motores

         que devoran América.

 

 

 

3

El ojo del poeta mirando  obscenamente

ve la superficie del redondo mundo

        con sus techos borrachos

        y oiseaux de madera en tendederos de ropa

        y sus machos y hembras de barro

        con calientes piernas y pechos como pimpollos de rosa

        en camas plegables

y sus àrboles llenos de misterios

y sus paeques domingueros y estatuas mudas

y su Amèrica

         con sus pueblos abandonados y vacìas Islas Ellis

y su paisaje surrealista de

        estùpidas praderas

        suburbiales supermercados

        cementerios con calefacciòn de vapor

        fiestas silenciosas en cinerama

        y protestonas catedrales

un mundo a prueba de besos con plàsticos asientos de retrete tampax y taxis

        drogados vaqueros  de drugstore y vìrgenes de Las Vegas

        marginados indios y cinèfilas matronas

       senadores no romanos y no objetores de conciencia

y todos los otros fatales y apuntalados fragmentos

del sueño del inmigrante que se convirtiò en demasiado real

        y perdido

                entre los que toman el sol

 

 

5

        En algùn momento de la eternidad

                algunos tìos se presentan

y uno de ellos

        que se presenta muy retrasado

        es una especie de carpintero

     de un sitio de mierda

               como Galilea

          y comienza a vociferar

            y afirma que està enterado

    de quièn creò el cielo

                     y la tierra

                         y que el tipo

            que nos colmò de rollos

                   es su Papà

        Y ademàs

           añade

            Todo està escrito

                      en una especie de rollos de papiro

           que algunos secuaces

                dejan  esparcidos por algunas partes del Mar Muerto

                    hace mucho tiempo

                        y que ni siquiera los encontraràs

en dos mil años o màs

        o al menos en

    mil novecientos cuarenta y siete años

             para ser exactos

                               y aùn asì

             nadie cree en ellos realmente

                    o en mì

                       de verdad

 

Eres cojonudo

            le dicen

 

Y le despachan para el otro barrio

 

Y le ponen a estirar en el Àrbol para que se enfrìe

 

Y despuès de esto

             todos estàn haciendo siempre modelos

          de este Àrbol

               con el Colgao

y siempre canturreando Su nombre

           y llamàndole a Èl para que baje

            y forme parte

                    de su combo

              como si fuese el cabecilla

              que tiene que tocar

o  si no la cosa no funcionarà

         

             Pero èl no baja

                      de su Àrbol

 

 

 

Queda colgado allì

               en su Àrbol

                      y parece estar hecho polvo por completo

                        y muy colocao

                              y tambièn

          segùn un resumen

             de las ùltimas noticias del mundo

         de las habituales fuentes al parecer no fidedignas

                muertìsimo

 

 

7

Què podìa decir ella al fantàstico osobromista

y què podìa decir al hermano

y què podìa decir

                al tipo con pies futuros

y que podìa decir a la madre

despuès de aquel momento en que acostò lascivamente

               entre las flores chupete

        en aquella calurosa ribera

            donde los helechos se desparramaban en el aire roto

         del aliento de su amante

        y los pàjaros se volvieron locos

            y se tiraron de los àrboles

para catar caliente todavìa sobre el suelo

          la derramada semilla del esperma

 

 

 

13

No como Dante

        al descubrir una comedia

                            sobre las vertientes del cielo

Yo pintarìa un Paraíso

                    distinto

donde la gente estarìa desnuda

        como siempre estàn

               en escenas asì

                      porque se supone que es

                              un retrato de sus almas

pero no habrìa àngeles ansiosos contàndoles

           que el cielo es

                    el retrato perfecto de

                                           una  monarquía

            y no habrìa fuegos ardiendo

                      en las bocas infernales de abajo

                 donde podìa haber caìdo

              ni ningún altar en el cielo excepto

                            las fuentes de la imaginación

 

 

16

   El castillo de Kafka se yergue sobre el mundo

Como una ùltima bastilla             

       del Misterio de la Existencia

Sus ciegos accesos nos confunden

                empinadas sendas

          descienden bruscamente hacia el vacìo

                               irradian carreteras por el aire

como laberìnticos cables

                           de una central telefònica

por la que todas las llamadas son

                             infinitamente incontrolables

       Allà arriba

           el tiempo es divino

    las almas bailan desnudas

                                  juntas

               y como remolones

                      en los lìmites de una feria

            miramos insistentemente al inalcanzable

                                         misterio imaginado

            pero allà en el otro lado

                           como la entrada de artistas de un circo

hay una ancha abertura en el muro

                           por donde hasta los elefantes

                                            entran a bailar

 

 

17

Esta vida no es un circo donde

los tìmidos perros amaestrados del amor

                                                     observan

mientras el tiempo saca chasqueando

                                        su trucado làtigo

            para hacernos correr mostrando nuestras habilidades

No obstante alegres carromatos de gala pasan a la deriva

 decorados con hermosìsimas chavalas con mallas de seda

       y atendidas por maternales monas

            fingidos monjes

            cachondas hiawathas

       y babuinos montados en domados tigres

         con damas dentro

      mientras curvas trompetas tocan una mùsica de tiovivo

         y pantomìmicos pierrots castan al desastre

              con una extraña y triste risa

    y ensangrentados gorilas tiran tiernas mozas hacia el cielo

mientras los que bailan el cakewalk y los buscavidas de carnaval

    borrachos  como cubas

         se ponen en poses de cartelera

  y se tambalean detràs de todas

                          las cosas que ruedan

Mientras que dando todavía vueltas a la pista

        los deformados camellos de la lujuria van a medio galope

   y todos nosotros somos payasos como Emmett Kelly

             forjando siempre imaginarias escenas

con todas nuestras màscaras por rostros

             hasta comer Ùltimas Cenas

                                          en mesas plegables

          y mofàndonos nos santiguamos

                    haciendo cruces de serrìn

 

Sin embargo finalmente tragamos

           para  absolver nuestras almas circenses

                 las tambièn imaginarias

                                     hostias de la gracia

 

 

24

Nos sentamos en cuclillas en la playa del amor

  entre mandolinas de Picasso desbordantes de arena

   y enterradas zarpas de gato que no reconocen            esfinge alguna

     y papeles de las meriendas

        pinzas de cangrejos muertos

          y huellas de estrellas marinas

 

Nos sentamos en cuclillas en la playa del amor

  entre sirenas encalladas

     con sus berreantes niños y maridos calvos

       y animales caseros de madera

         con cucharillas de helado por pies

           que no pueden caminar ni amar

                 excepto para comer

 

Nos sentamos en cuclillas al borde del amor

 y estamos seguros como sòlo los intrusos lo estàn

   entre encharcados restos

                       de mareas de salado sexo

       y los dulces riachuelos de semen

                       y flàccidas pichas enterradas

    en la suave carne de la arena

 

Y aùn reìmos

  y aùn corremos

    y todavìa nos lanzamos

                     sobre los barcos del amor

       pero es màs profundo

                       y mucho màs tarde

                            de lo que pensamos

                  y todo se hunde

                       y todas nuestras boyas de amor nos fallan

 

Y bebemos y nos ahogamos

 

 

25

Al ser tirado

        el corazòn se da la vuelta

             boqueando “Amor”

 

    un imprudente pez que intenta tomar

         aliento de la carne del aire

 

Y allì no hay nadie para escuchar su muerte

                                     entre los arbustos tristes

 

 

26

Aquella “fosforescencia sensual

                que mi juventud gozaba”

          ahora queda casi detràs mìo

                    como una tierra de sueños

              donde un ángel

                            de cálido dormir

          baila como una diva

                             con extraños velos

                a cuyo travès el deseo

                                         mira y llora

 

Y todavía baila

                 baila todavía

       y todavía viene

                   hacia mí

                        con jadeantes senos

        y labios secretos

                          y (ah)

                               brillantes ojos

 

 

Cristo bajò (Mensajes orales)

 

Cristo bajò

de su Árbol desnudo

este año

y huyò donde

no habìa ningún dorado árbol de Navidad

ni ningún árbol de Navidad con hilos de plata

ni ningún árbol de Navidad de papel de estaño

ni ningún árbol de Navidad de plàstico rosado

ni ningún árbol de Navidad de oro

ni ningún árbol de Navidad negro

ni ningún árbol de Navidad verdeazulado

con velas eléctricas colgadas

y rodeados de trenes eléctricos de hojalata

y listos parientes cursis

 

Cristo bajò

de su Árbol desnudo

este año

y huyò donde 

ningún intrépido vendedor de Biblias

cubría nuestro territorio

con cadillacs de dos colores

y donde ningún nacimiento de los Almacenes Sears

incluyendo al niño de plástico en el pesebre

llegaba por paquete postal

el niño por correo urgente

y donde no había Reyes Magos televisados

alabando el whisky Lord Calvert

 

Cristo bajò

de su Árbol desnudo

este año

y huyò donde 

ningún gordo y desconocido estrechador de manos

con un traje de franela colorado

y una falsa barba blanca

iba  por todas partes haciendose pasar

por algún tipo de Santo del Polo norte

cruzando el desierto de Belèn

Pensilvania

en un trineo Volkswagon

arrastrado  por traviesos renos de los Adirondack

con nombres alemanes

y llevando sacos de Humildes Regalos

de la sastrería Saks Fith Avenue

para el imaginado niño Jesùs de cada uno

 

 

Cristo bajò

de su Árbol desnudo

este año

y huyò donde 

ningún cantante de villancicos a lo Bing Crosby

gemía sobre una Navidad achispada

y donde ningún ángel de Radio City

patinaba sobre hielo sin alas

por un invernal país de las maravillas

hacia un cielo de “Dulce Navidad”

diariamente a las 8:30

con matinés para la Misa de Gallo

 

Cristo bajò

de su Árbol desnudo

este año

y se escabulló hacia

algún útero de una anónima María otra vez

donde en la más oscura noche

de la anónima alma de todos

Él espera de nuevo

una inimaginable

e imposible

Inmaculada Reconcepción

la más loca de todas

las Segundas Venidas

 

 

Retratos del Mundo Ido

1

  Allí afuera sobre un puerto lleno

                               de casas sin calafatear

entre chimeneas tipo charley noble

        de un tejado enjarciado con tendederos de ropa

      una mujer pega velas

                                   en el viento

      colgando sus mañaneras sábanas

                                  con pinzas de madera

              Oh mamìfero encantador

                              sus  casi desnudas tetas

                  lanzan rígidas sombras

                                        cuando consigue

       colgar por fin el último de sus

                               tan blanqueados pecados

       pero es húmedamente amorosa

                                    y se enrosca a su alrededor

       pegándose a su piel

                        Así sorprendida con los brazos levantados

                echa  hacia atrás su cabeza

                                          con una muda risa

           y con un gesto no elegido

                              sacude luego su dorado cabello

mientras en los espaciados paisajes marinos inalcanzables

entre las mortajas golpeadas por el viento hasta quedarse blancas

           destacan las brillantes banderolas

                                 por los siglos de los siglos

 

 

11

        El mundo es un hermoso lugar

                                                 para nacer

si no te importa que la felicidad

                                     no sea

                                           tan divertida

si no te importa que todo se vaya a freír puñetas

                                                 de cuando en cuando

         justo cuando todo marchaba bien

                 porque hasta en el cielo

                           no se canta

                                 todo el rato

 

El mundo es un hermoso lugar

                                                 para nacer

si no te importa que algunas personas mueran

                                                  diariamente

         o que quizás sólo padezcan hambre

                         parte del tiempo

                   lo cual no es tan malo del todo

                                    si te toca a ti

 

Oh el mundo es un hermoso lugar

                                                 para nacer

               si no le das demasiada importancia

                   a nuestras mentes muertas

              en los altos cargos

                        o a una o dos bombas

de vez en cuando

       que caen en vuestras caras mirando hacia el cielo

   u otras cuantas cosas impropias

                              de las que cae presa

nuestra sociedad de Marcas Conocidas

                      con sus hombres de distinción

              y sus hombres de extinción

                                                   y sus curas

          y otros guardias de tráfico

                        y sus diversas segregaciones

                  e investigaciones del Congreso          

                                              y otros estreñimientos

       de los que es heredera

                       nuestra imprudente carne

 

Sí el mundo es el mejor sitio de todos

         para muchas de estas cosas como

       representar la escena divertida

                    y representar la escena del amor

y representar la escena triste

    y cantar canciones en voz baja y tener inspiraciones

 y caminar por todas partes

      mirándolo todo

               y oler las flores

  y dar pellizcos a las estatuas

           y hasta pensar

                     y besar a la gente y

      hacer niños y llevar pantalones

                         y saludar con los sombreros y bailar

                                    e irse a bañar en los ríos

                             en excursiones

                                      de pleno verano

          y generalmente               

                      “pasárselo bomba”

 

   pero justo en medio de todo eso

                                  llega el sonriente

           empresario de pompas fúnebres

    

 

 

 

 

 

       

  

 

         

Jacques Prèvert.

En la esquina de una calle

Es mediodìa, todo està muy oscuro
y de repente rojo de vez en cuando
En la esquina de una calle que ya no existe
la muerte se pasea como en su casa.

A mì no me importa, espero el arcoiris
y el arcoiris, es mi amante
El amor se oculta no importa dónde
el amor se encuentra no importa cuándo
el amor se hace no importa cómo
el amor es más joven que la muerte
aunque hayan visto la luz al mismo tiempo
En la esquina de una calle que ya no existe
que acaba de partir hace un instante
la muerte està al acecho, engaña.

A mì no me importa, yo espero a mi amante
estoy seguro de que hoy, para ella
en todo caso no serè su cliente.

 

Era el verano

En sus dos manos
Bajo mi falda levantada
Yo era desnuda como nunca
Todo mi cuerpo joven
Era una fiesta
Desde la punta del cabello
Hasta las uñas de mis pies
Yo era una fuente que guiaba
La vara del zahorì
Hacìamos el mal
Y el mal estaba bien
***
Un sòlo pàjaro en la jaula
la lbertad està de luto
Oh mi juventud
deja a mi alegrìa de vivir
la fuerza de matarte.
***
Yo amo màs
tus labios
que mis labios.
***
Dios hizo al hombre
a su imagen.
El exhibicionistas le rinde homenaje
***
No soy yo quien canta
son las flores que he visto
no soy yo quien rìe
es el vino que he bebido
no soy yo quien llora
es mi amor perdido.

 

El fusilado

Las flores los jardines los surtidores las sonrisas
Y la dulzura de vivir
Un hombre yace ahì en el suelo bañado en su sangre
Los recuerdos las flores los surtidores los jardines
Los sueños infantiles
Un hombre yace ahì en el suelo como un paquete sangrante
Las flores los surtidores los jardines los recuerdos
Y la dulzura de vivir
Un hombre yace ahì en el suelo como un niño dormido.


El tierno y peligroso rostro del amor


El tierno y peligroso
rostro del amor
se me apareció una tarde
al final de un muy largo día
Era quizás un arquero
con su arco
o bien un músico
con su arpaYo ya no sé
Yo no sé nada
Todo lo que sé
es que me ha herido
tal vez con una flecha
tal vez con una canción
Todo lo que sé
es que me ha herido
herido el corazón
y para siempre
Ardiente muy ardiente
herida del amor.


Mi pequeña leona

Mi pequeña leona
no me agradaba que me arañaras
y te entregué a los cristianos
Pero te amaba de verdad
Yo quiero que me perdones
mi pequeña leona


El río

Tus jóvenes senos fulgían bajo la luna
pero él ha lanzado
la guija helada
la fría piedra de los celos
sobre el reflejo
de tu belleza
que danzaba desnuda sobre el río
en el resplandor del estío.


Para tí amor mío

Fuí al mercado de los pájaros
Y compré unos pájaros
Para tí
amor mío
Fuí al mercado de las flores
Y compré unas flores
Para ti
amor mío
Fuí al mercado de hierro viejo
Y compré unas cadenas Unas cadenas pesadas
Para ti
amor mío
Y luego me fuí al mercado de esclavos
Y allí te busqué
Pero no te encontré
amor mío.


Canción del pajarero


Un pájaro que vuela lentamente
Un pájaro rojo y tibio como la sangre
Un pájaro tan tierno un pájaro burlón
Un pájaro que de repente tiene miedo
Un pájaro que de repente se golpea
Un pájaro que quisiera huir
Un pájaro solo y asustado
Un pájaro que quisiera vivir
Un pájaro que quisiera cantar
Un pájaro que quisiera gritar
Un pájaro rojo y tibio como la sangre
Un pájaro que vuela tan suavemente
Es tu corazón bella niña
Tu corazón que bate el ala tan tristemente
contra tu seno tan duro tan blanco.


Canción


Qué día es hoy
Hoy es todos los días
Amiga mía
Hoy es toda la vida
Amor mío
Nos amamos y vivimos
Vivimos y nos amamos
Y no sabemos nada de lo que es la vida
Y no sabemos nada de lo que es el día
Y no sabemos nada de lo que es el amor.


Jacques Prèvert.
Poemas. Trilce Editores, Bogotà, 2001.

Roberto Fernandez Retamar.

Con las mismas manos.
El otro. (Enero 1, 1959)

Nosotros, los sobrevivientes,
¿a quièn debemos la sobrevivencia?
¿Quièn se muriò por mì en la ergàstula;
quièn recibiò la bala mìa,
la para mì, en su corazòn?
¿Sobre què muerto estoy yo vivo,
sus huesos quedando en los mìos,
los ojos que le arrancaron viendo
por la mirada de mi cara,
que la mano que no es su mano,
que no es ya tampoco la mìa,
escribiendo palabras rotas
donde èl no està, en la sobrevivencia?