El mercader de palabras
Viviste de ella
No le pagaste su valìa en lo que valìa
La vida te llevaba hacia otras cosas
Distraìdo te olvidaste de la Inspiradora
y ella se alejò de tì
No le ofrecìas un altar de sus merecimientos
Terrible enemistad:
Su cara adusta seca la boca
Estrangula el sentimiento
Sus gestos desolados nublan el alma
Ahora quisieras Oh querido
no haberla herido tanto
Raùl Gòmez Jattin
Amanecer en el valle del Sinù.
Ediciones Fondo de Cultura Econòmica, Bogotà, 2004.
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