Dios
De vez en cuando un amigo se convertìa: algo que me hacìa vomitar. Yo tenìa tan poca necesidad de Dios como Èl de mì y con frecuencia me decìa que , si Dios existiera, irìa tranquilo a su encuentro y le escupirìa en la cara.
Henry Miller
Tròpico de capricornio.
Punto de lectura, Madrid, 2003
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