Apuntes
Cu`ntas veces uno se ha mirado al espejo creyèndo saber quièn es, seguro del pasado y de la gente que habita en èl, y de repente, en un momento se pierde la certeza. Es lo que debiò sentir Robinson Crusoe cuando se supo solo en la isla. Y surge la misma inquietud.¿te hundes en la desesperaciòn o sobrevives?
Sin embargo la desesperaciòn es una fiebre pasajera, sube a cuarenta grados, luego remite y te deja envuelto entre las sàbanas calientes de una convalescencia voluptuosa, para despuès lanzarte de nuevo a la calle. Asì que, supongo, sòlo queda seguir viviendo.
¿Has visto alguna de esas pelìculas en las que el protagonista despeirta y descubre que toda la realidad en la que cree y ha basado su vida ha desaparecido, se borrò como en un sueño o se cae como un decorado viejo y mal pegado?
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SEÑOR
¿Por què no me esnseñaste
a buscar agua
en medio del desierto?
¿Por què no me dijiste
còmo proteger la llama de mi làmpara
contra el viento gèlido
que desviste las dunas
y la hace oscilar
casi hasta apagarse?
¿Por què no me mostraste
còmo lograr que la fe
fuera màs fuerte que el desaliento,
que la esperanza
no se encauzara en amargura?
¿Por què no me inculcaste
el valor suficiente
para dejar que la vida
me crucificara bocabajo
y sacara de mì
hasta el ùltimo resquicio de la sangre?
¿Por què permitiste que me convirtiera
en este monigote desabrido?
¿Por què me dotaste
de este estùpido albedrìo
en el que desperdiciè
toda mi libertad?
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