Arbitro insobornable.
Limitar nuestro auditorio limita nuestras claudicaciones. La soledad es el ùnico àrbitro insobornable.
Nicolàs Gòmez Dàvila.
Limitar nuestro auditorio limita nuestras claudicaciones. La soledad es el ùnico àrbitro insobornable.
Nicolàs Gòmez Dàvila.
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