Blogia
estabolsanoesunjuguete

Cibernetica

Libro único: Puesto que el hombre y la novela son isomorfos, lo normal sería que ésta pudiera contener todo lo que tiene que ver con aquél. (…) En el fondo todo debería poder transformarse en un libro único, que uno escribiría hasta poco antes de su muerte; esa manera de vivir me parece razonable, feliz, y quizás hasta posible de llevar más o menos a la práctica.

 

Buenos y malos poemas: La inteligencia no ayuda en absoluto a escribir buenos poemas; sin embargo, puede impedir que uno escriba poemas malos.

 

Novela ideal: Me gustaría que no hubiera ninguna diferencia. Un libro de poemas debería poder leerse de un tirón, de principio a fin. Del mismo modo, uno debería poder abrir una novela en cualquier página, y leerla con independencia del contexto. El contexto no existe. Es bueno desconfiar de la novela; no hay que dejarse atrapar por el argumento; ni por el tono, ni por el estilo. También en la vida cotidiana hay que andar con cuidado para no dejarse atrapar  por la propia historia o, de forma aún más insidiosa, por la personalidad que uno imagina que es la suya. Habría que conquistar cierta libertad lírica; una novela ideal debería poder incluir pasajes en verso, o cantados.

 

Búsqueda sexual: …El objetivo mayoritario de la búsqueda sexual no es el placer, sino la gratificación narcisista, el homenaje que una pareja deseable rinde a la propia perfección erótica.

 

Poesía: La poesía es el medio más natural de traducir la intuición pura de un instante. Existe, sí, un núcleo de intuición pura que puede producirse directamente en imágenes o en palabras. Mientras vivimos en la poesía, vivimos también en la verdad. Los problemas empiezan después, cuando hay que organizar esos fragmentos, establecer una continuidad a la vez razonada y musical.

Michell Houellebecq

 

0 comentarios